Uno de los aspectos más interesantes de la entrevista, es la
relación que se dé entre el entrevistador y el entrevistado. Es una relación
dinámica que se desarrolla conforme avanza la sesión. Inicia en la
primera ocasión en la que las dos personas interactúan y puede cambiar de
muchas maneras antes de que la entrevista concluya. la relación entre entrevistador y
entrevistado es un medio para comunicar y recibir informaciones, valorar
actitudes y sentimientos, y ayudar el desarrollo del entrevistado a través de
las experiencias educativas y orientadoras.
La entrevista
comienza cuando el entrevistador tiene el primer contacto con el entrevistado.
Las primeras impresiones son importantes. La apariencia y las diversas conductas no verbales, se interpretan e influyen en la actitud del entrevistador hacia el entrevistado.
Las primeras impresiones son importantes. La apariencia y las diversas conductas no verbales, se interpretan e influyen en la actitud del entrevistador hacia el entrevistado.
Como notas destacadas que caracterizan la relación entrevistador, entrevistado, se suelen mencionar:
· Es una relación asimétrica, porque, aunque se actúe con actitudes no directivas, el tutor se sitúa siempre un plano de ayuda y conducción de la entrevista, y el alumno en plano de inmadurez, indecisión y demanda de información y consejo. Por otro lado, las diferencias de edad y experiencias vitales acrecientan esa dicotomía.
· Se trata de una relación dinámica, ya que el contacto personal y directo es un intercambio, en el que ambos se influyen mutuamente a través de la expresión, palabras, gestos, movimientos, silencios. La mayor participación del entrevistado aporta, generalmente, más dinamismo a la relación.
· Es una relación única, porque cada entrevistado es distinto a los demás. Incluso lo es el entrevistador al verse afectado por las diversas influencias que ejercen en él los diferentes entrevistados. Las mismas entrevistas mantenidas con un mismo tutor configuran relaciones diferentes por ser distintas las situaciones y estados de ánimo de ambos. Por tanto, cada relación es única e irrepetible. No hay dos relaciones iguales y lo que puede suceder en ellas es imprevisible. De aquí que no se deba generalizar demasiado ni ajustarse a esquemas rígidos de actuación. Sin embargo, sigue siendo útil el conocimiento de las técnicas y la preparación de las entrevistas.